Rapport y confianza
“La verdadera habilidad de
un coach es extraer las soluciones del experto real (el cliente)”. John Grinder.
Un principio de la PNL
dice: “Todas las personas poseen recursos y habilidades para poder cambiar
según sus circunstancias”.
En el proceso de Coaching
este principio es la base para comenzar un camino de nuevas posibilidades
orientadas al logro del estado deseado. Es un estilo de liderazgo.
En un proceso de flexibilidad
en la conducta y creatividad para tomar decisiones, resolver conflictos, identificándolos para poder encontrar soluciones.
El Coach acompaña y motiva
al cliente en la búsqueda interior, mediante preguntas lo guía en este proceso
de aprendizaje, reconociendo sus recursos, creencias y valores. Hay un cambio de
mirada orientada a la acción.
La PNL permite
descubrir qué influencia tiene nuestra forma de pensar y actuar sobre los
resultados que obtenemos y darnos cuenta qué podemos hacer en forma diferente
para alcanzar resultados diferentes.
El coach al entender como
piensa, siente y acciona su cliente puede facilitarle herramientas dinámicas,
según sus características personales, que le permitan reconocer las
limitaciones que le impiden concretar sus objetivos, hacer los cambios
necesarios para desarrollarse en cada área de vida.
Las herramientas que
dispone el coach le permiten lograr rapport con el cliente para generar un
entorno de confianza y fluidez que favorece la calidad de la comunicación.
El rapport es una cualidad
que surge en una relación de mutuo respeto. El rapport se construye donde ambas
partes se influencian. Estando en rapport entendemos el estado de la otra
persona, nos podemos poner en sus zapatos. El Coach establece rapport y
entiende el estado de su cliente. Cuando estamos en rapport no es necesario
estar en un todo de acuerdo, a pesar de las diferencias y habiendo respeto
mutuo podemos lograrlo.
La confianza genera
seguridad, fortaleza, coraje y como en el rapport la construimos con nuestro
comportamiento, requiere tiempo. Confiamos en aquello que creemos que es bueno
para nosotros, es algo flexible, no es una cualidad de todo o nada. La
sinceridad y la competencia son atributos de la confianza.
El Coach es merecedor de
confianza cuando:
Es auténtico, es importante
recordar que también es un ser humano.
Es honesto, dice la verdad
en forma respetuosa.
Es congruente, está en
rapport consigo mismo.
Presta atención y escucha.
Es flexible, tiene sentido
del humor, desdramatiza y puede mostrar otras perspectivas.
Mantiene su palabra.
Posee competencias para
intervenir profesionalmente y posibilitar cambios, utilizando estrategias
dinámicas.
Hoy más que nunca se
recurre al coaching a nivel personal y empresarial con el objetivo de mejorar
el desempeño de personas y equipos, en la búsqueda de progreso en sus capacidades
comunicacionales, optimizando los recursos que permitan clarificar objetivos y
obtener resultados deseados. Alcanzando niveles de excelencia en la gestión.