La Educación en este nuevo siglo presenta un gran desafío para padres y docentes: interactuar en una sociedad compleja, competitiva con desbalances en las relaciones, los límites, los valores y al mismo tiempo proponer objetivos para despertar la curiosidad, la motivación hacia el aprendizaje en sí mismo como proceso innovador, socializante, optimizando las relaciones interpersonales, fomentando el diálogo, para abrir espacios de escucha, cooperación y negociación.
Desde que nacemos incorporamos información a través de nuestros sentidos. Esta información es filtrada generando nuestros pensamientos formando programaciones, que nos conducen y guían durante la vida, mediante los diferentes comportamientos. Los seres humanos son el producto de sus pensamientos, acerca de lo vivido y experimentado y son estos pensamientos los generan emociones que predispones o no para la acción.
La responsabilidad de padres y docentes reside en pensar que modelos presentan a los niños, que valores inculcan, que creencias (limitantes o potenciadoras) instalan.
¿Son respetados sus intereses como seres individuales? ¿Cómo nos vinculamos? ¿Dialogamos, fomentando debates constructivos a pesar de las diferencias? ¿Ponemos límites y los sostenemos?
La tarea educativa, como parte del proceso de socialización, consiste en formar seres valiosos, seguros de sí mismos, responsables y comprometidos con sus acciones.
En el proceso educativo docentes y alumnos intercambian vivencias y acciones. Se comunican.
El maestro eficiente, es el que logra cercanía, confianza con sus alumnos dando sentido a la tarea educativa.
La comunicación que permita generar empatía, aceptando las diferencias y resaltando los valores individuales y grupales permitirá el acercamiento, fortaleciendo la relación docente- alumno.
La capacitación desde la PNL destinada a educadores y futuros educadores tiene como objetivo contribuir a que los docentes se conviertan en facilitadores para optimizar la gestión educativa y el proceso enseñanza- aprendizaje, aprender a aprender, proponer objetivos y obtener los resultados deseados.
Aprender a escuchar y observar a los alumnos. Leer el lenguaje corporal. Conocer los sistemas representativos para entender como captan la información y las vías de acceso (visual, auditivo, kinestésico) y el uso correcto del lenguaje para llegar a cada alumno como así también tener en cuenta las diferentes etapas del aprendizaje para orientar los contenidos.
La Programación Neurolingüística proporciona todas las herramientas para elaborar una educación donde cualquier alumno pueda aprender rápida y fácilmente acompañados por docentes que puedan integrar las diferentes realidades generando estados mentales orientados de logro.