La resiliencia es la capacidad que tienen los individuos para enfrentar, reaccionar y salir fortalecidos después de experiencias dolorosas, que impactan en todas las áreas de vida.
En algún momento de la vida nos enfrentamos a este tipo de situaciones, que afectan nuestro plano emocional, provocando tristeza, angustia, enojo, depresión, apatía, ansiedad.
No es sobrevivir a pesar de todo. Es la capacidad de sobreponerse, que se manifiesta de modo diferente en cada individuo, supone cambiar el enfoque y empezar a mirar hacia delante para proyectar el futuro.
En este proceso la personalidad y el entorno interactúan recíprocamente.
Recursos personales y sociales, autoestima consistente, lazos afectivos significativos, la creatividad, humor positivo, red de pertenencia, posibilitan dar un sentido a la situación presente y permiten el surgimiento de alternativas de solución frente a la situación adversa.
Características de las personas resilientes
*La introspección. Que nos permite examinarnos, encontrar respuestas positivas frente a situaciones adversas, buscando los recursos que nos permitan accionar.
*La independencia. Mantener distancia emocional y física de la situación conflictiva, sin caer en el aislamiento.
*La interacción. Relacionarnos satisfactoriamente con otras personas. Buscar modelos, referentes, permitirnos recibir apoyo.
*Creatividad. Capacidad para crear nuevas situaciones de orden a partir del caos que posibiliten plantear nuevos objetivos superadores.
*Sentido del humor. Espíritu de positividad que permitan dar cabida a la esperanza como fuente de inspiración.
*Conciencia moral. Todos nuestros valores y creencias expansivas que sustentan nuestra identidad.
En los casos de duelos es fundamental que el entorno facilite la expresión del dolor, en este caso la escucha activa permitirá que afloren las emociones, permitiendo la contención, la confianza, comprendiendo la situación y respetando los tiempos del proceso, facilitando la recuperación.
El amor es el factor de resiliencia más poderoso.
Somos resilientes por naturaleza.
La PNL ayuda a las personas y grupos a atravesar situaciones adversas aprendiendo de las experiencias, haciendo conscientes los recursos que permiten recobrar el estado de bienestar.