domingo, 14 de junio de 2015

La autoestima.- nuestra valoración personal. –


La primera y mejor victoria es
la conquista de uno mismo

Autoestima: Es conocerse a sí mismo. Valorarse. Reconocer errores y aprender a aprender de ellos. Tener confianza en uno mismo.

Reconocer nuestro grado de autoestima no sólo es importante para nosotros mismos sino también para proyectarnos con éxito en el logro de nuestros objetivos y establecer relaciones saludables.
Cuando cambiamos nuestra valoración personal, cambian nuestros pensamientos, nuestro estado emocional, enviamos mensajes positivos a nuestro cerebro y actuamos en consecuencia. Cuando mejora nuestro mundo interno, mejora la percepción del mundo externo.

Las experiencias vividas en los primeros años de vida de un niño son el fundamento de una sana autoestima. Padres, educadores, el entorno en general contribuyen a construir una autoestima consistente.

Te invito a ver este video "Fichas de póquer" que nos permite reflexionar.



https://youtu.be/_BuP5XuMZGA

Una buena autoestima permite:

Determinar nuestro grado de autonomía, equilibrio. Dispuestos a enfrentar situaciones de cambio.

Tomar decisiones con responsabilidad.

Saber reconocer nuestras capacidades y recursos disponibles.

Ser confiables y positivos.

Tener energía para enfrentar los desafíos, viéndolos como oportunidades de aprendizaje.

Ser creativos, buscar alternativas, adquirir flexibilidad.

Asumir compromisos, ser personas íntegras.

Ser responsables de nuestra realización personal, sabiendo que merecemos lograr los objetivos propuestos.

Actuar de manera asertiva, priorizando lo importante, sin interferencias ni manipulaciones.


Una buena autoestima, consistente, es el resultado que surge de reconocer quien soy (identidad) para que soy apto y que quiero ser. Así nos aceptamos y valoramos como la persona que somos, sin perturbarnos pensando en aquello que deberíamos ser.
La autoestima posibilita vivir con una actitud productiva orientada al éxito basada en pensamientos expansivos y la capacidad de emprender la acción.



sábado, 6 de junio de 2015

La creatividad

Nuestro cerebro creativo

El cerebro es creativo por naturaleza. Piense en él como un bio-ordenador que se utiliza para aprender y reflexionar. Para obtener su mayor provecho tenga en cuenta que:

  • El cerebro puede tomar una idea y a partir de ella crear nuevas ideas y relacionarlas con las ya existentes (sinergia).
  • Puede conseguir todo aquello que sea capaz de imaginar, siempre y cuando, disponga de información adecuada. El cerebro ansía el éxito.
  • Los objetivos escritos ayudan a su cerebro a central la atención en las acciones necesarias para lograrlos.
  • El cerebro tiene la capacidad de imitar acciones.
  • El cerebro necesita permanentemente nueva información para cubrir los espacios en blanco y completar el cuadro de situación.
  • Las nuevas ideas son el alimento del cerebro. Igual que la comida lo es para el cuerpo.
  • El cerebro siempre busca la verdad.
  • El cerebro busca resultados. Es tenaz, siempre y cuando sepa lo que desea
                                                               

¿Qué es la creatividad? (Asociación Educar)

“La creatividad es un proceso mental. Esto implica la participación en mencionado proceso de los siguientes factores: la mente, el cerebro (produce esa mente), el cuerpo (percibe los estímulos sensoriales del mundo exterior y dónde repercuten somáticamente todas aquellas sensaciones producto de esta actividad cerebral) y el medio ambiente con el que esa unidad Cuerpo-Cerebro-Mente (UCCM) interactúa y desde el cual se nutre.

Este proceso mental al que llamamos creatividad también es conocido como pensamiento original, pensamiento creativo, inventiva, imaginación constructiva o pensamiento divergente.

La creatividad es la capacidad de crear, de innovar, de generar nuevas ideas o conceptos, o inéditas asociaciones entre ideas y nociones conocidas, que normalmente llevan a conclusiones que antes no existían, resuelven problemas y producen soluciones originales y valiosas.

Si tenemos en cuenta que la evolución del cerebro hasta llegar al humano, hace 150.000 años, ocurrió por una necesidad adaptativa para sobrevivir en un mundo natural con muchos peligros y escaseces, entonces, comprenderemos también por qué, en este sentido, la creatividad es un tema central en la humanidad: la capacidad de pensar en algo nuevo y mejor es lo que hace que la sociedad y la civilización humana avancen, en definitiva, hacia nuevas y mejores representaciones.

¿Cómo generar espacios ricos para desarrollar la creatividad?

1) Ocio y Recreo.

“El ocio no es creativo. La creación es obra del ocio.” Sergio Bosio

Está demostrado: hay que sentirse lo más relajado posible, disfrutando de lo que hace para la aparición de ideas nuevas. Si hay tensión, las ideas no surgen porque la mente está muy ocupada. Las mejores ideas aparecen cuando las personas no están trabajando, sino socializando, leyendo, mirando televisión, caminando y durmiendo.

Culturalmente se juzga el ocio como sinónimo de pereza, comodidad o improductividad. Esta interpretación se heredó de la Roma Antigua donde un recreo estaba estrechamente relacionado a la holgazanería. Por el contrario, en la Antigua Grecia se apelaba a la vida contemplativa como una segunda vertiente del trabajo físico. El desafío será, entonces, reconsiderar el significado que le damos a la palabra “ocio”. Deberíamos pensarlo como “recreo” en el marco de un espacio en el cual descansamos de las exigencias cotidianas para poder lograr un ocio creativo, semejante a la metodología griega.

2) Relajarse.

Aunque hay que admitir que el momento ¡Eureka! no llega a menos que la persona haya estado pensando y trabajando obsesivamente en ello, en una mente estresada, las áreas del cerebro activas no permitirán que las áreas implicadas en el proceso creativo hagan esas conexiones y desconexiones necesarias para crear. Para que llegue el momento ¡Eureka! hay que estar tranquilos.

3) ¡Bienvenido el Error!

Los adultos deberíamos reaprender a ser niños en este sentido. Éstos, quienes son extraordinariamente creativos, no tienen miedo a equivocarse, ese es su punto de partida. Estar equivocado no es lo mismo que ser creativo, pero si no estamos preparados para equivocarnos, nunca llegaremos a nada original…

4) Lío, desorden.

La imaginación no es ordenada, toma elementos de aquí y de allá para conjugarlos creando una cosa nueva. Esto no quiere decir que no se respeten las reglas de limpieza y hábitos de la casa, la escuela o el trabajo pero un permiso en este sentido no está mal. Se puede hacer un poco de “lío” y después ordenar.

¿Por qué es importante que como seres humanos nos demos el permiso de ser creativos?

“El futuro es incierto... Pero esta incertidumbre está en el corazón mismo de la creatividad humana.” Ilya Prigogine

Fundamentalmente, la creatividad está directamente relacionada con la felicidad. Es decir, somos felices cuando encontramos aquello que queremos hacer, para lo que tenemos habilidad (inteligencia), somos buenos , nos encanta y nos permite, además, solucionar problemas, afrontar incertidumbres y desafíos de forma positiva y constructiva.

La creatividad nos permite alcanzar la satisfacción personal de crecer como personas y poder, de esta manera, afrontar más positivamente los inciertos desafíos de un mundo en movimiento. Por esto, debería estar presente en todos los aspectos de la vida y de todas las personas

Se necesita ser muy creativo para ser más tolerantes a las frustraciones, pudiendo re significar situaciones o errores y, finalmente, poder lograr aquello que deseamos y nos hace felices”