viernes, 27 de septiembre de 2013

PNL y Coaching

**Muchas personas no saben que tesoros
 pueden estar ocultos a  simple vista, 
aunque pueden descubrirlos.**


El coaching posibilita a personas y grupos desarrollar su creatividad reconociendo sus recursos para obtener los resultados deseados.

Muchas veces pasar del estado presente al estado deseado genera incertidumbre, dudas y es allí donde se plantean las dificultades para proponer objetivos y comprometerse con ellos. Postergan la toma de decisiones, temen al cambio, salir de la zona de seguridad, no confían en sus fortalezas y tienen miedo a equivocarse. Se encuentran desorientados, incapaces de actuar.

Las personas o grupos que acude al coach (coachee) necesitan clarificar su estado para luego descubrir el camino que los conducirán a lograr aquello que se proponen o mejorar los logros ya obtenidos.
El coach ayuda a enfocarse en sus objetivos. Los orienta para que descubran sus recursos, parte de la premisa que “pueden lograr aquello que desean” le transmite seguridad, mejora su comunicación interna e interpersonal y los motiva a producir resultados efectivos. Ayuda a decidir, a pensar y hacer.

El objetivo del Coaching es lograr resultados positivos y duraderos en el tiempo. Es un proceso que comienza con una alianza entre en coach - cliente  basada en la comunicación, el respeto mutuo y la sinceridad.

El Coach acompaña, escucha atentamente, calibra, genera rapport. 
Plantea el “qué” para que el o los clientes generen el “como”. No emite opiniones, juicios, sólo realiza preguntas precisas, orientadoras, a través de las cuales  los guía para que encuentren las respuestas que  permitirán definir en forma clara y precisa sus metas, se centra en sus valores y desafía sus creencias limitantes, al cuestionarlas podrán cambiarlas y refuerza aquellas creencias expansivas que le permiten actuar.

Mediante las sesiones de coaching se logra renovar el compromiso con la vida, cambiar el estado emocional, se acepta el cambio como posible, flexibilizar la conducta, se aprende a aprender, la conducta es proactiva,  la mirada se orienta hacia las metas u objetivos, que hace posible encontrar soluciones y estrategias, equilibrando las áreas de vida, en busca del estado de bienestar.




martes, 10 de septiembre de 2013

PNL - Cambio de conductas

     El hábito de posponer. Procastinación


¿Qué sucede cuando postergamos la realización de determinadas acciones o la toma de decisiones que implican el logro de un objetivo?
¿Cómo influye en nosotros y en nuestro entorno?
¿Qué nos impide accionar?

Seamos sinceros, todos en algún momento tendemos a postergar determinadas tareas, acciones por simple desgano o porque la consideramos tediosas, incómodas.

No confundamos postergar con establecer prioridades, en este caso nos organizamos de manera consciente.

Cuando la actividad en cuestión se relaciona con el logro de un objetivo, es conveniente, ecológico, analizar los motivos de la postergación.
El primer paso es identificar cual es la intención que hay detrás de ese comportamiento.

Un principio de la PNL dice:

Toda conducta o comportamiento tiene o tuvo en algún momento una intención positiva (para algo me sirve, tiene un sentido para mí).

¿Cual es la verdadera causa de la postergación?
Pereza, desgano, miedo al fracaso, falta de confianza en los resultados, consideramos que no es el momento adecuado, estrés, estados depresivos, falta de concentración, distracciones innecesarias.

Una vez que tengamos definida la causa de la postergación podemos buscar la forma de encarar a acción actuando de manera diferente.

¿Qué pasaría si esa tarea que te resulta tediosa le agregas un recurso motivador que la haga interesante y te permita lograr tu o objetivo?
Por ejemplo: Es conveniente que realice actividad física para lograr bajar de peso, me disgusta hacerlo sola/lo.
¿Si invito a un amigo para que me acompañe, de esta manera será más entretenida? Así un cambio permite encarar la acción, buscando recursos, que permiten el  logro del objetivo.

En su libro El manual del procrastinador: el arte de hacer las cosas YA, Rita Emmett asegura: "El temor a realizar una tarea consume más tiempo y energía que hacer la tarea en sí. La evasión del deber no sólo aumenta la preocupación y procrastinación, sino que produce sentimientos de culpa que impiden un verdadero disfrute del tiempo libre".

En ocasiones postergamos esperando que se den las condiciones óptimas, tener todo bajo control, que garanticen el resultado deseado.
¿Es esto posible? No, ya que todo proceso de logro de un objetivo requiere de nosotros flexibilidad en la conducta que nos posibilite realizar nuevos aprendizajes, realizar cambios sobre la marcha, si son necesarios, para enfrentar los desafíos que se presenten.

Recuerde:
Accionar supone audacia, compromiso, responsabilidad.

Las oportunidades están allí, esperando. Tú decides cuando aprovecharlas, puedes elegir entre decir “Tengo qué… en un Decido que…..de esta forma diriges tu energía hacia tus metas, cuando  vas por ellas y accionas las cosas suceden.

“Los seres humanos necesitan ordenar su vida para dar lo mejor de sí mismos.
El orden de nuestros días nos devuelve de muchas formas una imagen de nosotros mismos.” (I Tornabene)

“Nada es tan fatigante como la suspensión eterna de una tarea sin terminar”  (William James)